viernes, 20 de noviembre de 2015

"El asombroso viaje de Pluma de Ángel" - 2015, por Michèle Rodríguez.


¡Hola a todos!

 Tengo el placer de -por fin, después de muchas semanas en el correo y en mis carpetas- traer la primera reseña por encargo al blog. ¡Yuhu! No hace mucho colgué un anuncio donde comentaba que no quería hacer esta entrada de prisa y corriendo, y mucho menos leerme el libro de ese modo, así que... he ahí el motivo de mi tardanza.

 Tal vez no sea realmente por encargo... Más bien, Michèle buscaba difusión de su bonito y nuevo cuento infantil y me topé en las redes con ella, de modo que aquí estoy. Espero que os guste, recordad que podéis pasaros por su sitio web para conocer más sobre ella y sobre su obra: Pienso y Vivo luego Escribo. Sin más dilación...


- "El asombroso viaje de Pluma de Ángel" ó "Le voyage de Plume d'Ange", títulos originales de las versiones en castellano y en francés.
- Autor/a: Michèle Rodríguez
- Páginas: 114
- Edición digital disponible en Amazon

Michèle nos brinda muy amablemente el primer capítulo de este texto infantil junto a otro primer capítulo de otra de sus obras; puedes leerlos aquí.

Sinopsis:

Una tarde de verano, Paul, de nueve años, aprovecha la hora de la siesta para explorar la biblioteca de su abuelo, a pesar de tenerlo prohibido. Ahí, descubre una maravillosa pluma blanca, que desprende reflejos irisados. Es preciosa, brillante, parece tan suave al tacto que siente la tentación de tocarla pero de pronto, aparece el gato de su abuela y se le adelanta. Paul la rescata al último momento de las garras del animal, sin saber que para él, acaba de empezar una aventura inolvidable...


Con estas palabras la autora nos introduce en una obra plagada de similitudes, de metáforas de lo que a menudo supone la vida para todos nosotros, y en una historia preciosa y fascinante para los ojos de cualquier niño.

Si hablamos del aspecto técnico y físico, vemos que el libro se divide en capítulos, dando al cuento un ritmo marcado que divide las distintas aventuras que viven nuestros personajes: Paul y su recién hallada Pluma. No me gusta entrar en detalles que revienten lo que uno va a leerse, de modo que diremos que la estructura es simple y sencilla, ideal para que los más pequeños comiencen a leer solos o en compañía de un adulto: pienso sinceramente que ese rato es fundamental en la vida de cualquier niño, el simple hecho de leer un cuento con un ser querido es un momento esencial, de comprensión hacia el niño y confianza, admiración mutua. Los cuentos son ese nexo que une las aventuras con las que todos hemos soñado y con las que los niños crecen.

Comenzamos el libro entonces con situaciones y escenas adaptadas a niños pequeños, ¿quién no ha hecho una de esas incursiones furtivas, como aparece en la sinopsis? Michèle utiliza escenas, pensamientos y situaciones muy cercanas a la mentalidad de los niños, que no siempre es infantil. El vocabulario en algunos puntos puede resultar complejo, esto puede verse como un punto en contra o como uno a favor, pues precisan de alguien con quien compartir el libro para comprender.

Tenemos entre manos pues una aventura que nos adentra en distintos valores, enseñanzas para nuestros pequeños -y por qué no, para nosotros-. 

Uno de ellos es el siguiente concepto, que visto el panorama actual puede ser delicado. La presencia de ciertos aspectos cercanos a la religión, que es la impresión que primero da pero... Se nos introduce un concepto de paraíso que puede verse como tal a través de un punto de vista católico, pero por otra parte no tiene por qué: casi todo el mundo tenemos algo en lo que creer, ya sea en una religión, en una persona, en un objeto, idea... 

Pienso que esto es una enseñanza importante que inculcar hoy en día. No hay por qué despreciar a otros por sus creencias, el respeto y la confianza, saber guiar o dejarse conducir es importante para tener una mentalidad razonable, respetada y respetable, y esto nuestra autora nos lo deja muy claro con las aventuras de Paul y Plume, pues abarca distintos personajes con rasgos muy diferentes, con lo que introduce también al lector en un sentimiento de tolerancia y respeto, de convivencia con otros y comprehensión. Como está tan de moda parece: ver más allá de las apariencias.  

Otro punto importante en el desarrollo de la etapa de la niñez hacia la madurez es a exploración de sensaciones, de los sentidos, frío, calor... Miedo. Saber adaptarse, entender y enfrentar el miedo es importante, y muy por encima de todo ello está cierto sentido emocional que puede verse despierto por las lineas de Michele: valorar a quienes queremos y a quien nos quiere.

A simple vista con toda esta perorata que he puesto en medio puede resultar una lectura pesada, llena de segundos sentidos o metáforas. Las tiene, sí, no deja de ser un cuento con una moraleja que transporta al lector a un trampolín directo al aprendizaje de la vida, pero no por ello es empachoso. Es un libro ligero, muy indicado para etapas tempranas, como iniciación a la lectura, o como libro para leer pedacito a pedacito cada noche. Y sobre todo y como ella nos muestra... Como camino hacia la literatura y la poesía.

Dejarse guiar en esta vida y saber ser alguien en quien confiar para otros es importante. Dejémonos guiar todos por la lectura, ya sea para grandes o para pequeños, siempre tendremos algo que aprender. En su momento pensé que no, que este sería otro libro para niños con moraleja, que lo es... Pero no dejo de reparar en la cantidad de cosas que uno vuelca cuando escribe algo así. Saber verlo, tratar de comprender es algo que aprender por mi parte y por el resto de lectores que se unan al viaje de Paul y Plume d'Ange...

Espero que os haya gustado, que no haya sido pesado -en exceso-, y en especial a Michèle, que te haya gustado este pedacito de mi en relación con tu libro; sigue escribiendo cosas tan bonitas, por favor. 

¡Saludos a todos! No olvidéis dejar un comentario por aquí ~ 


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